Calle de Zaragoza en Valencia

La calle de Zaragoza, corta y estrecha se extendía desde la Puerta de los Hierros de la Catedral hasta la Plaza de la Reina, y era una de las calles comerciales de la ciudad más activas y transitadas, así como una de las más castizas. Las plantas bajas de los edificios estaban dedicadas al comercio, lo que aún puede apreciarse en la parte izquierda de la ampliada e irregular Plaza de la Reina, que adquirió su nuevo aspecto merced a los sucesivos derribos que acabaron con esta calle a mediados del siglo XX.

Destaca la perspectiva urbana de esta calle, que ofrecía como telón de fondo la puerta barroca de la Catedral, comenzando cerca de Santa Catalina. Las casas eran, y aún son hoy en parte, de factura novecentista bastante pobre y, por lo general, de tres pisos, como correspondía a una calle estrecha. Su importancia radicaba en ser vía de tránsito obligado para los que iban al centro de la ciudad y en la aparente estrechez, que aumentaba las proporciones de la fachada barroca de la Catedral y las de la propia Plaza de los Hierros, donde finalizaba.


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